Amargas despedidas, ¿alegres bienvenidas?

Me lo he pasado tan bien, he estado tan a gusto con los míos estos días, he descansado y desconectado tanto de la vida real, que me he quedado con la mente en blanco, el espíritu calmo y me cuesta unir la P con la A. Qué jodío es el cuerpo humano, que si no le das un poco de movimiento y descarga eléctrica, te deja tirado en plena carretera. ¡Arráncalo por Dios, trata de arrancarlo!


Estos 10 días de playa con sol, lluvia, viento, otra vez sol, niños, mayores, surf inesperado, italiano de siempre, aperitivos, huevos escondidos y cariñosos reencuentros con amigos que hubo un tiempo perdidos, han sido estupendos. He vuelto morena, descansada, contenta y descargada. Pero se me ha pasado volando. Diez días suenan a mucho pero no lo son, que el tiempo es alarmantemente relativo y aun más para los que queremos mucho a nuestra familia.


Anoche ya nos engrasamos el cuerpo, para que empiece a tirar de nuevo, con un Kentucky. Toma ya qué rico y que sano. La mente la intentamos animar con Come, Reza, Ama (y luego vete a cagar...) que, por supuesto, no funcionó mucho en lo que a conexión neuronal se refiere. Menudo chustón de película y de ridículo portugués que hace que habla Bardem. La única lógica que encuentro es que hayan querido hacer ese flin para pasarse unos días de gorra en Italia, comiendo espaguetis con tomate, y en Bali tocándose los huevos a la sombra. Al final, hasta encontré fea a Julia Roberts. Así que no funcionó y tenemos que buscar emociones más fuertes.


Pero poco a poco. Paso a paso. Sin estresarse, por favor, que ya volveremos a la actividad en cuanto podamos, mañana. Ya volveremos a la actividad nosotros los vivos o de color carne, digo, que los que nos acompañan jugando con las luces de casa, no paran quietos. 


Gracias por darnos la bienvenida a Barcelona encendiendo de nuevo una luz en la noche, y tener el detalle esta vez de que sea otra lámpara, por si teníamos dudas de que fuera una cosa rara de la conexión del cable de la anterior... Gracias por hacernos saber que no estamos solos y que nos habéis echado de menos. Menos mal que no se os ha ocurrido hacernos una fiesta sorpresa con payasos, que eso hubiera sido demasiado pasote. Quizás lo podriais hacer cuando vengan a vernos Baptiste y Desi, que están al caer! 


De momento, esta noche alquilamos Paranormal Activity 2, que seguro que os apetece más que el rollo de ayer y así la vemos juntos. Que solos Kike y yo nos cagamos de miedo.